María Fernanda Ledesma, de 25 años, se encontraba realizando la guardia de la medianoche en la Escuela Federal de Policía en Buenos Aires, Argentina, cuando afirmó escuchar un misterioso ruido que procedía de una de las aulas que se encontraba vacía en esos momentos.
Según informó Mirror Online, María Fernanda rápidamente llamó a su superior para informar sobre lo que estaba escuchando. Minutos después llego Goycochea, el responsable en ese momento del turno de noche, pidiéndole a María Fernanda que esperara fuera de la aula mientras el revisaba la habitación. Goycochea no vio nada inusual por lo que no dieron importancia al incidente. Tanto el oficial de policía como la aspirante volvieron a sus respectivos puestos.
Y cuando todo parecía ser una simple anécdota, María Fernanda volvió a escuchar extraños ruidos procedentes del interior de la misma aula, aunque esta vez mucho más fuertes. No se lo pensó dos veces y fue corriendo a la habitación con su revolver en mano, justo en el momento de ver una gran sombra negra dirigiéndose hacia ella para atacarla. Entre esos momentos de locura, la aspirante consiguió correr hacia el baño más cercano, donde se encerró. Cuando se miró al espejo vio aterrorizada como tenia sangre en la cara, brazos y en el pecho.
María Fernanda tuvo que acudir a la enfermería donde le atendieron por diversos rasguños en varias partes de su cuerpo, además de informar inmediatamente del incidente a sus superiores que iniciaron una investigación.
“Tan pronto como mi jefe se fue, volví a escuchar el ruido de nuevo”, explicó María Fernanda. “Saqué mi revólver y fui hacia el aula, cuando vi esa sombra negra volando por la habitación hacia mí. Antes de que pudiera reaccionar, me agarró y me gritó. Corrí a toda velocidad hacia el baño donde me encerré. Entonces, me di cuenta que tenía sangre en la cara, brazos y pecho y vi que me había arañado.”
Por su parte, el director de la Escuela Federal de Policía se encargó personalmente de investigar el caso, quien afirmó que aunque parezca un tema poco serio es realmente preocupante ya que esta no es la primera vez que ocurre algo parecido.
“El tema parece ser poco serio, pero es delicado pues la denuncia puede comprometer a quienes se encontraban cerca de la denunciante”, señaló un portavoz de la policía.
Fuente: mirror.co.uk
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